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A veces bajan al Inframundo.

10 mar 2009

El reloj de arena.


Eres un reloj de arena sin arena…” tras ese aullido tan inteligible para mí (entendí perfectamente esta frase) el lobo salió corriendo de este terreno. No le gustaba pisar por el agreste suelo duro de aquí abajo. Las rocas zaherían sus patas, sus pezuñas tan pulcramente cuidadas.
Dos frases, hace ya mucho dejó otra aullando en mis oídos, dejó en mi cabeza. Era el momento de girar el reloj, pero… que arena caería si ya había perdido toda.
Había dejado perder, grano a grano, la esencia de mí. Todo lo he dejado pasar, he dejado pasar el tiempo, tan importante, de mi reloj y ahora ya no se puede recuperar.
Razón tenías, lobo, he perdido tontamente.
Y no supe como seguir sin tiempo. Ahora ya no hay tiempo ni que ganar ni que perder. Está todo acabado o sin empezar…
Ahora, sólo puedo esperar que mientras dejo que se arrastren mis pies, la arena vuelva al reloj (si eso fuese posible…).

Hoy, sin arena, sin fuerzas, no puedo escribir más.

Gracias Lycans por mi definición.

Saludos desde el Inframundo.

6 comentarios:

istharb dijo...

Upssss eso suena a "tocado de fondo", pero como todo, tocar fondo tiene su lado bueno. Claro que te voy a decir cual es el lado bueno, faltaría mas!!! jajajajaj

El lado bueno es que peor no se puede estar, así que pa´lante como los de alicante!!!!!

Hablando de Alicante, me voy de vacaciones la semana que viene!!!!!!!!!!!! jajajajajajaja

No, no voy a Alicante, pero la playa es la playa, y anda que no tiene arena!!!!!!!

Sabes que, te voy a contar los cambios que te veo con el sinvivir. jajajajajajaja Ni de coña!!!!!!!!!!!!!!!!

Un beso guapa

josé lopez romero dijo...

Coincidiendo con tu texto, fue casualidad leer uno bastante viejo que encontré en una caja de guardar canciones que garabateo para nadie y dice: "Me calcé el reloj y salí a la calle, olvidé el amor y pasar de mi madre, extravié el perdón y los buenos deseos, y la revolución que tenía en el pecho / Empecé a caer despacito sin freno, y vi mi película estuve en su estreno, era yo sin rumbo entre luces y orgullos, en mi pequeñez que vagaba al oscuro".
Me gustó mucho tu texto, te descubrí hoy. Mi afecto.

Miss Hyde dijo...

Por favor, conserva al menos la esperanza.
Besitos.

Abril Lech dijo...

No te dejes engañar una vez más! El tiempo no está en la arena. Ni dentro de ningún reloj. Eso no es el tiempo. Eso es una medición lineal del transcurso de un ciclo. El tiempo, el tiempo es otra cosa... Tiene una eternidad que no acaba y no conoce de principio ni fin. Pasa lineal a nuestro lado pero es circular.

La arena que se escapó es una pobre representación de algo tan extenso que ahora deberás aprender a encontrar en los sucesos. Allí está el tiempo.

Suerte y besos de arena...

Lycans Laqueus dijo...

Me alegra haberte dado una definición con la que te sientes identificada, pero ya sabes, lo que vale es acostarse sabiendo que con reloj o sin el, con arena o sin ella, el tiempo que ha pasado, quede marcado en nosotros. Eso de aprovechar el tiempo... aunque sabes que en según que cosas yo creo que lo andas perdiendo, vendiendo o quemando pero es tu vida... lo único que tienes y nadie puede ponerle letreros ni lindes.

Un lobo aullandote en el alma

Ana Muela Sopeña dijo...

No existe el tiempo desaprovechado. TODAS las experiencias son válidas. Algunas parece que nos llevan a "alguna parte" otras a "ninguna parte", pero en realidad todo son ilusiones. Amar y ser amada es una gran experiencia. Amar y ser traicionada o simplemente no amada es otra gran experiencia, aunque duela. Lo terrible es no experimentar nada. Placer y dolor se tocan. La vida es como un péndulo. Si gozas sufres. Si aceptas lo hermoso, de pronto viene lo terrible. Sólo los que viven en un término medio ni sufren ni gozan...A veces parece que el tiempo pasa y no salimos de un ciclo límite. Una especie de círculo vicioso sin puerta de salida. Pero también ese estancamiento es una vivencia que nos permite aprender...Posiblemente algo sobre nosotras mismas. NUESTRA DEBILIDAD y nuestra fuerza. Tocar fondo puede ser el requisito indispensable para resurgir de las cenizas, como el ave fénix.

Escribes muyyyyy bien.

Felicitaciones

UN ABRAZO con afecto
Ana